hipersudoración
La hipersudoración o hiperhidrosis focal primaria consiste en una sudoración excesiva que puede afectar a las actividades de la vida diaria de los pacientes. La hiperhidrosis puede ser de localización palmar, plantar o axilar. Existen distintos tratamientos que ayudan a reducir la cantidad de sudoración producida. Las formas leves se pueden beneficiar de tratamientos médicos clásicos, mientras que las de intensidad moderada o grave suelen ser resistentes a ellos. Existe un tratamiento quirúrgico (simpatectomía transtorácica) que puede resolver algunos de estos casos.
El Bótox o Toxina Botulínica Tipo A se ha convertido en los últimos años en un tratamiento seguro y eficaz para la hiperhidrosis, actuando sobre las glándulas sudoríparas y reduciendo la cantidad de sudor producido. Su mecanismo de acción consiste en bloquear las fibras colinérgicas que estimulan la producción de sudor.
Para realizar el tratamiento es necesario delimitar la zona hiperhidrótica mediante el test del yodo – almidón de Minor, y sobre ella se marcan los puntos de inyección. El tratamiento se realiza bajo anestesia local o troncular para mejorar el confort del paciente. El tratamiento incluye una sesión de revisión a los 30 días del tratamiento inicial. El efecto de la Toxina Botulínica tipo A se mantiene durante 6 a 8 meses en función de las características del paciente y de la zona tratada, tendiendo hacia la prolongación del efecto con sucesivas aplicaciones.